MANIFESTACIONES

Por fín se celebraron las manifestaciones contra el terrorismo, no sin antes marear la perdiz entre todos los partidos, si pone esto no voy yo, ah pues si pone aquello, soy yo quien no va. Y si cedes y pones lo que yo pedía, se siente, porque es demasiado tarde y yo tengo ya otros planes. Solamente en Pamplona lograron ponerse de acuerdo todos los partidos que tienen allí representación y acudir unidos. ¡Bien por los navarros! Y mal, muy mal por los partidos en el resto del estado español que no fueron capaces de entenderse ni siquiera para esto que tanto nos afecta a todos. ¿Si no se ponen de acuerdo a la hora de defender el derecho más primordial, que es el derecho a la vida, en cual se pondrán que no sean sus propios intereses creados? Estas actitudes de los partidos, no es que generen confusión en los ciudadanos, sino un inmenso hastío. Y este cansancio se ve después muy claramente en las elecciones, cada vez les votan menos, no es que cambien de este a aquél partido, no, es que acaban por no ir a votar siquiera.
Que se enteren de una vez que los ciudadanos quieren simplemente poder vivir tranquilos, poder viajar, sin temor de saltar por los aires en cualquier momento, salir a tomar un café, sin estar mirando al vecino de barra por si saca una pistola y te dispara en la sien, pasear, sin tener que andar mirando a todos lados para ver por donde te puede venir un ataque. Porque los ciudadanos que no son profesionales de la política, es decir la mayoría del pais, no tiene guardaespaldas, ni chaleco antibalas, ni coches blindados, ni aviones privados a menos que sean multimillonarios y de esos, hay poquitos y encima no suelen andar por la calle ni ir de rebajas ni al cine de su barrio. Los ciudadanos quieren vivir en un pais libre del miedo, libre del terror y libre de la estupidez de creer que los terroristas son buenos chicos mal aconsejados. Quieren que las fuerzas del orden estén para lo que su nombre indica y los jueces, para lo que indica el suyo. Y los políticos, para gobernar o, desde la oposición, vigilar a los que gobiernan. Así de sencillo. No les pedimos la luna. Simplemente que hagan su labor y que la hagan lo mejor posible. Sin medias tintas y sin engaños. Que no nos digan que no hacen lo que en realidad están haciendo a nuestras espaldas. Que no se comporten como niños cuando ya son hombres y encima se han pedido responsabilidades a las que nadie les obligaba. Ya tienen esas responsabilidades, pues bien, sepan utilizarlas y sepan que hay muchas vidas que dependen de que lo hagan bien. Los experimentos, con gaseosa.