DE TODO, MENOS TRABAJAR

DE TODOS MENOS TRABAJAR

Hemos tenido ocasión de ver a la Izquierda más desagradable y dura en estos días a cuenta de las declaraciones de Javier León de la Riva, alcalde de Valladolid, del PP, a quién se le ocurrió comparar los morritos de Pajín con unos dibujos animados que no citó y dijo que le sugerían pensamientos que tampoco especificó, a saber cuales eran. Pero desde la Ministra Sinde hasta los de la "la ceja" todos han protestado enérgicamente calificándole de machista. Y se han santiguado al grito de ¡Huy, lo que ha dicho!

Sin embargo, llega el alcalde de Palencia, Heliodoro Gallego Cuesta, socialista de pro, y dice que "sus concejalas tienen los glúteos bien prietos" y nadie dice nada, ni es comentario machista, ni de mal gusto, nada de nada; callan los de "la ceja", calla Sinde, Aído, Trini y todo el coro de la Izquierda celestial.

Y Pepiño el Blanco, que no pierde comba, dice en un discurso público que "a Rajoy se le ve el plumero porque tiene más plumero que nadie" Y ningún Zerolo se ha rasgado las vestidura llamándolo machista y homófobo, mire usted por donde. Y aunque ha pedido disculpas en la radio, no al aludido, también las pidió el alcalde de Valladolid publicamente y no le ha servido de nada. 

También ha dado otro discursito Blanco en el que recordaba que en la primera legislatura de Rodríguez, Rajoy decía que los socialistas iban a llevar a España a la ruina y, se atrevía a continuar, "y ya ven donde está España". Pues ya lo vemos, sí, en plena ruina.

De lo que se deduce que hay ódenes rubalcanianas de distraer al personal achacando al PP todo lo que puedan y lo que no, en un intento desesperado de dar la vuelta a las encuestas. Pero los ciudadanos no somos tontos y no debemos dejarnos engañar por sus añagazas, lo que queremos es que trabajen cada día y se dejen de insultos, y en el caso específico de Blanco que deje de recortar en Obras Públicas y recorte de su Ministerio, lujos, coches y sueldos; y el resto de Ministerios, lo mismo, no queremos igual perro con otro collar, queremos que cambien las formas. Que trabajen o se vayan, no hay más.