EL INEFABLE CAROD

Tentémonos las ropas y echémonos a temblar que llega el inefable Carod. Es recibido en su despacho con toda pompa por el sr. Moratinos con motivo de que se incorpora a la "política exterior catalana" y claro pues se le recibe como al ministro de asuntos exteriores de otro país. Esto, a pesar de que en el artículo 149.13 de la Constitución se expresa claramente que la política exterior y las relaciones internacionales son competencia exclusiva del Estado. Y cuando nos acordamos del triste episodio de la foto del inefable Carod con la corona de espinas en la cabeza y de la ridícula reunión de Perpiñán, no podemos menos de preguntarnos, ¿pero qué han hecho los catalanes para merecer esto?. Y el sr. Rodriguez, tan feliz, así contenta al nacionalismo.