NO DIMITE NADIE

Aquí no dimite nadie, faltaría más; dice la Ministra de Sanidad, Elena Salgado que ella no sólo no dimite, sino que ni siquiera lo ha pensado y que no se siente en absoluto desautorizada por el Gobierno, al verse obligados a retirar al Anteproyecto de Ley de Prevención del Alcohol sine die. Que las Municipales están al caer y la presión social ha sido fuerte. Ahora dice que no hemos sabido ver el problema. ¿No será que lo hemos visto demasiado bien? mejor que ella, diría yo, porque el problema no está en el vino o la cerveza, que son alimentos, como reconocen otros Ministerios, sino en las bebidas de alta graduación alcohólica, que son con las que los jóvenes hacen el botellón. No se hace un botellón de Cava, ni de un Ribera del Duero, aunque se ve que la ministra, no se ha enterado. Como no se ha enterado aún este gobierno que no es cuestión de prohibir a troche y moche, que ya circulan hasta chistes por ahí sobre ese tema, sino de Educar, con mayúscula, señora ministra, Educar.
Celebren la feliz buena nueva, al viento de febrero los muñones esperanzados, vibren de felicidad las Airen, Verdejo, Godello, Albariño, Malvasía, Garnacha, Palomino, Graciano, Monastrel, Cavernet-Sauvignon, Malbel, Shyrah, Pinot Noir, Tempranillo, Bonarda, Sangroveje, Mourvedre, Chenin, que la cultura mediterránea se ha salvado, podemos respirar tranquilos, hasta otra, claro.