NUEVOS AMIGOS

En la presentación del número 100 de La Aventura de la Historia, se nos aparece el sr. Rodriguez invitado por P.J. Ramirez, quien como recordarán es quien más le ha vapuleado desde su periódico, El Mundo, con el tema del ácido bórico, la mochila de la furgoneta, el piso de Vallecas y lo que se tercie. Pero como en cuatro meses estamos en elecciones municipales, no se puede desaprovechar ninguna oportunidad de poder hablar en público y decir más de lo mismo. Así que ya tenemos al sr. Rodriguez recitando su discurso eterno, aunque esta vez con una frase sibilina que nos hace meditar. "recibí una España debilitada y dejaré una España más fuerte",
¿está pensando en irse?. Misterio. Mientras tanto, todo su esfuerzo y toda sus capacidades dice dedicarlas a acabar con el terrorismo, que, aparte del inmenso ego que representa tanto mi, mi, mi, o sea, su inmenso yo, estas capacidades se han demostrado bastante escasas, amén de su tendencia a enfatizar lo obvio porque bueno estaría que no quisiera acabar con el terrorismo y que no se esforzase en ello. Lo peor es que pueda tener razón la oposición, cuando apunta a que ya ha reanudado las conversaciones, cosa que ha dicho también Batasuna, como si lo de la T4 hubiera sido un pequeño accidente. Nos promete acabar con la violencia pero los hechos se compadecen mal con sus palabras. Y lo peor es que sus problemas se los crea él mismo. ¿quién aconseja a este hombre hablar siempre de lo que va peor en vez de enfatizar sus logros?. La economía española está en un momento excelente, gracias al sr. Solbes, por ejemplo, y hay muchas otras cosas que van bien, pero no, el sr. Rodriguez se empecina en decirnos que va bien justo lo que va muy mal. Sueña por las noches brillantes soluciones y se ve obligado cada día a crearnos un problema para poder aplicarlas. Y por este camino que vamos, no descartemos unas elecciones generales anticipadas en otoño.