miércoles, 28 de febrero de 2007

PROHIBIDO PROHIBIR

Ahora el príncipe Carlos de Inglaterra la toma con los McDonald's. Pretende que desaparezcan para que la gente no engorde. ¿estamos locos, con tantas prohibiciones? Yo puedo asegurar que no he pisado en mi vida un McDonald's, ni siento la menor necesidad de ello, ni similares, pero creo en la libertad individual, tanto la de montar un negocio como la de consumir en él. McDonald's puede ofrecer lo que le parezca, que yo lo comeré o no, según me parezca. Como si me quiero encerrar en casa con cinco litros de crema fresca de Normandía y tres kilos de fresas. ¿También van a prohibir eso, lo que compremos y consumamos en casa? Pues a los que tanto les gusta prohibir, que empiecen por prohibir la estupidez humana, empezando por la propia, desde luego.

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