LA ESPAÑA DE DOS

LA ESPAÑA DE DOS

Estamos en la España de los dos grandes partidos y los demás, si quieren, que se sumen.

Pero dentro de los dos partidos mayoritarios hay diferencias, las caras de funeral de muchos en el PSOE ante la próxima reforma constitucional, las miradas aviesas entre Rodríguez y el candidato Freddy, a quien le acaban de fastidiar el invento de la República Democrática de las redes sociales, donde pensaba encontrar su semillero de votos, con esta reforma exprés que no sirve para nada ni contenta a los mercados pero pone de mal humor a muchos en España, da que pensar.

Obediencia debida y ciega a la "carta europea", la misma que ha recibido Italia y que la prensa italiana ha publicado y que aquí el Gobierno niega haber recibido, pero se obedece. Pero ojo, que la carta hablaba también y sobre todo de la reforma laboral más que urgente y de eso hablamos poco y mal y no hacemos más que apaños y parches.

Sólo Antonio Gutierrez, ex secretario general de C.C.O.O., rompió ayer la disciplina de voto ordenada en el PSOE, hace demasiado frío fuera del partido y la confección de las  listas está en marcha, aquí no se mueve nadie antes de las elecciones no sea que no salga en la foto, como decía Alfonso Guerra.

Satisfacción en cambio en el PP, puesto que esta reforma ya la pidió Rajoy hace más de un año. Magnífico discurso el que hizo ayer Soraya Sáenz de Santamaría ya en clave de vicepresidenta, pero hubieran quedado mucho mejor si la reforma no fuera descafeinada y hubiera un techo real y no hipotético y sobre todo más cercano, no para 2020 sino para 2014, por ejemplo. Y naturalmente que se hubiera consultado al pueblo para saber su verdadera opinión al respecto. Esto les hubiera dado más votos.

Los nacionalistas, por esta vez, no sacan tajada al haberse puesto de acuerdo los dos partidos mayoritarios; esto les pone de los nervios y rabian y claman que "se ha roto el consenso constitucional de 1978", claro que estos sólo le llaman consenso a pescar algo en río revuelto tal y como les tiene acostumbrado el PSOE cuando ha querido aprobar algo estando en minoría. Ya se entendió claramente a Durán i Lleida: es la primera vez en 40 años que se produce un gran pacto de Estado del que su partido no logra obtener algún beneficio gracias a su apoyo. Por una vez eso que nos hemos ahorrado, que no están los tiempos para gastos y los pactos con CIU siempre nos cuestan dinero, aquí todos miran por el Estado del Bienestar, más que nada el bienestar propio, claro es. Sin embargo sólo lo dicen con la boca pequeña y de cara a sus bases, porque todos saben muy bien que no pueden ponerse en contra del consenso europeo al que necesitan incluso para sus veleidades separatistas. No pueden indisponerse a las claras con Berlín, que apoya esta reforma y que ya puso techo hace tiempo a sus propios gastos, así que sus protestas son un brindis al sol, al Sol de los "indignados" sobre todo.

Y cuidadito con lo que hacemos de cara a las próximas elecciones, porque aunque las nuevas generaciones conocen poca Historia gracias al esfuerzo deseducador del PSOE, algunos recordamos que en octubre de1934 el PSOE y ERC dieron un golpe de Estado contra el Gobierno, el poder central y la legalidad republicana en manos de las derechas vencedoras de las elecciones, con la anuencia del Rey de España (así le fue después), y en ese golpe iba ya el germen de lo que fue más tarde la Guerra Civil. Así que más vale ir con pies de plomo, que el diablo las carga.