POR SUS HECHOS LOS CONOCERÉIS

POR SUS HECHOS LOS CONOCERÉIS

Entre las muchas tonterías de Rodríguez está la de nombrar a Trinidad Jiménez ministra de Asuntos Exteriores para agradecerle los servicios prestados (ya saben, contra Tomás Gómez y con resultado cero), pero con tan plena conciencia de que es sólo un florero, que solamente le sirve para llevar jamones a Chaves pero para los asuntos que cree importantes envía a Moratinos. Eso se llama hacer un pan con unas tortas, pero a los españoles nos cuesta el dinero.

Otra tomadura de pelo es pretender hacernos creer que estamos en una democracia, con división de poderes. Y va el Tribunal Supremo y deja el juicio a Otegui en una broma, que es lo que desea el gobierno. Citan a Jesús Eguiguren, que es el intermediario en las conversaciones con ETA, y le impiden hablar de las conversaciones del gobierno con la banda, eso no interesa que se diga. Pero sépanlo todos conversaciones hubo y sigue habiendo en la actualidad, aunque hipócritamente nos lo nieguen. Y el acto celebrado en el velódromo de Anoeta el 24 de noviembre de 2004 se celebró con el conocimiento del PSOE y el gobierno. El gobierno de Rodríguez está intentando por todos los medios que ETA acceda a la instituciones vascas y Patxi López es cómplice de ello y lo que es peor, la oposición o es tonta o también es cómplice de esta ignominia.

La idea es que Herri Batasuna participe en las elecciones y ETA a través de ellos y para eso sacan de la cárcel a Díez Usabiaga con el pretexto de que le de un vasito de leche a mamá por la noche, declaran que Otegui no exaltó al terrorismo, que es un angelito que sólo quiere el bien para todos. Al final los muertos se murieron solos y ETA no asesinó nunca a nadie, porque estos cambian la Historia a su voluntad. Pobres víctimas que hasta después de muertas son ninguneadas, el muerto al hoyo y el vivo al bollo, y de vivos saben mucho los socialistas.

Y otra vergüenza atroz es la manera en la que nuestro gobierno dobla  la cerviz ante el Califa y abandona a los saharauis una vez más y permite que se los masacre desde Marruecos, incluso a aquellos que tienen pasaporte español. Y encima se disculpan con la peregrina cuestión de que otros países no han condenado las acciones de Marruecos. Es decir nosotros no podemos tener opinión propia, tenemos que estar supeditados a la opinión de otros y obedientes siempre a los dictados del Califa que volverá a reivindicar para sí Ceuta y Melilla en cuanto asesine a todos los saharauis y deje aquello como la palma de la mano, la misma mano con la que busca quedarse con el petróleo del Sahara, un  territorio que ya existía y era español antes de que Marruecos existiese siquiera. Y cediendo, cediendo, incluso acabaremos nosotros siendo súbditos del Califa de Rabat, que Alá confunda por siempre.