LAS VACACIONES DE TOXO
Este año no ha tocado crucero de gran lujo por las capitales bálticas para el secretario general de Comisiones Obreras, Ignacio Fernández Toxo, como el año pasado.
Pensarán ustedes que con cinco millones de parados y en plena crisis, con nueve millones más de ciudadanos en el umbral de la pobreza extrema, un sindicalista de pro no puede disfrutar de vacaciones paradisíacas. Pero resulta que sí, que puede.
Este año ha elegido un resort de lujo en la isla de Madeira, el Pestana Casino de cinco estrellas de nada. Ocho días de lujo y casino a 160 euros por noche, comidas y cenas aparte, por lo que bien pudo pagar por la estancia de él y su mujer, Juana González, más de 4.500 euros del 21 al 28 de agosto más 1000 euros por persona de gastos de viaje en avión, como mínimo.
Y desde ese idílico enclave anunció la convocatoria de una manifestación junto a UGT para solicitar un referendum para la modificación de la Constitución.
Claro que con las numerosas subvenciones que reciben del Gobierno, las organizaciones sindicales no conocen crisis alguna. Vuelve a repetirse lo del año pasado, cuando desde el Báltico convocaba una huelga general, culpando a los empresarios de la crisis y la situación económica española.
Estamos siempre con lo mismo, ¿aquí quiénes son los ricos, los que arriesgan su propio patrimonio para poner una empresa y luchan por salir adelante creando empleo, o los que viven a todo lujo de las subvenciones del Estado que salen del dinero de todos los ciudadanos?
Juzguen ustedes mismos. En agosto, 51.185 personas más han quedado en paro. Cuando España no puede permitirse nada, Comisiones Obreras sí que puede, con nuestro dinero, claro.
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