Miguel Angel Desatinos se nos ha ido de turista a Gibraltar tirando por la borda no sólo 300 años de reivindicaciones españolas sino también la posibilidad de defender la españolidad de Ceuta y Melilla, así como la de Cataluña. Por eso se frotan las manos desde ERC, cuando se pierden dignidad y valores, sentido de Patria y de Nación y todo son antiguallas que hay que olvidar en aras de su palurdo modernismo, no podemos sorprendernos de como está la sociedad actual.
Si mañana se presenta en Ceuta el rey de Marruecos, nada podremos alegar. Debemos ser "modernos" y olvidar nuestra historia, total ya ni se enseña en las escuelas. Este acto del PSOE es de tal deslealtad que puede considerarse alta traición, sin paliativos. Y no sé que es peor, si su deslealtad a España o su estulticia diariamente demostrada. Y habría que saber si se ha avisado previamente al Jefe del Estado como sería preceptivo y qué ha opinado éste, o está más pendiente del yate que de lo que de verdad importa. De Rodríguez, no hace falta preguntarse nada, es la mano que mece la cuna.
En esta política del "todo vale" tiene la misma nula importancia el silbar el himno nacional o violar a una niña de trece años, se silba como libertad de expresión (el juez Santiago Pedraz, dixit), se viola o se asesina gratis porque los chavales son inimputables, los padres no tienen armas para reprender y los políticos miran para otro lado. Y el que no es inimputable, como si lo fuera, que anda por ahí el asesino de Sandra Palo, libre y viviendo a costa de nuestros impuestos, sin que la sociedad se levante de una vez y plante cara a estos políticos que parecen legislar para su exclusivo beneficio, siempre mayores sueldos y dietas para ellos mismos y el españolito de a pie que calle y apoquine.
¡Qué vergüenza!
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