LA COCINA DE LOS AROMAS, SABORES Y COLORES

Se cree que el azúcar se desarrolló en primer lugar en Persia, sobre el año 600 de nuestra era, refinando y solidificando el jugo de la caña de azúcar para facilitar su transporte y convirtiéndolo en un alimento raro y precioso. Se la conocía como "sal de India".

Está demostrado que el azúcar, como el alcohol, produce una ligera euforia cuando se consume y una ligera depresión cuando baja su efecto, es decir que se comporta como una droga en nuestro organismo.

El cultivo del azúcar antes de su industralización enriqueció a unos pocos e hizo sufrir a muchos en la esclavitud, su consumo excesivo creó nuevas enfermedades, como la diabetes, y paliativos, como las insulina.
Y, como todo, se llega a la conclusión que nunca debe consumirse en exceso.

Pero ya que limitamos la cantidad por los problemas que puede producir en nuestro organismo, podemos a cambio mejorar su color y aportarle aromas y sabores. Esto mejorará nuestros postres y los hará mucho más vistosos, además de poder disminuir la cantidad de consumo, puesto que con una mínima dosis tendrá un gran sabor.

Respecto del color, el azúcar se puede teñir con colorantes alimentarios, basta una gota.

Respecto al sabor, es suficiente añadir al azúcar una vara de vainilla o canela en un recipiente cerrado herméticamente para que adquiera su sabor y su aroma.

Otros aromas, como la menta, el limón o la naranja será necesario conseguirlos desecando el producto (se venden sabores industriales, pero no es ese el efecto que deseamos) y reduciéndolos a polvo posteriormente. Este polvo de naranja o de menta puede guardarse también solo, en un recipiente hermético, para su uso en recetas que no necesiten azúcar. El polvo de aromáticas rosas rojas, por ejemplo, dará un sabor y aroma inigualables a ciertos arroces y dulces. O polvo de violetas, o de flores de lavanda

Y este polvo también puede servirnos de perfumador para la casa si lo ponemos en un quemador de incienso con una vela encendida. Igualmente servirá para que nuestros regalos sean muy especiales, solamente con que nos acordemos de poner un poco de polvo perfumado en ellos.

También podemos realizar mezclas de nuestra especias favoritas, convertirlas en polvo y guardarlas en este tipo de botes, así conservarán todo su sabor para cuando vayamos a usarlas. Además, con unas bonitas etiquetas, adornarán nuestra cocina.