SUFRIDA BARCELONA

Lo de Barcelona es ya exagerado y se entiende perfectamente que en Cataluña estén que trinan. La cosa tiene ya visos de maldición biblíca (¿o de Rodríguez?). Entre el famoso apagón que los mantuvo durante días sin luz, sin agua caliente, sin poder cocinar, los grupos electrógenos que pusieron como solución y que no les permite el descanso por lo ruidosos que son, los cortes de luz durante horas, esta vez por las tormentas en vez de por el cable de marras, los atascos en la AP7 en la salida de vacaciones y en el resto de la ciudad por las tormentas o los accidentes, los retrasos y problemas con los trenes, ayer 120 convoyes de cercanías y otros 62 trenes con retrasos importantes, las maletas que se pierden en El Prat, como si fuera el aeropuerto de irás y no volverás. Lo que hay es un desprecio total por la ciudadanía y sus problemas, no se puede decir que los trenes se averían porque llueve, ¿es que acaso son trenes especiales para el desierto?. Menos luchas por conseguir el poder y más ejercerlo cuando se tiene, que no es un adorno. Menos echarse la culpa unos a otros y mejores y más rápidas soluciones para los problemas de los ciudadanos.