UN PASO MAS EN EL CONTROL

EEUU, va a dar un paso más en su lucha contra el terrorismo (¿o contra la libertad individual?) y va a instalar de aquí al 2010 un sistema de sensores que podrá auscultar sus más profundos pensamientos. Ahí es nada, usted está parado en las inevitables colas del control de pasaportes, recogida de equipajes etc...y unas cámaras, láseres, micrófonos, detectores de retina y sensores de movimiento y de todo tipo, están escrutándole silenciosamente y sin piedad, enviando datos sobre usted y todas sus funciones corporales al Gran Ordenador Central.
Este potentísimo ordenador procesará todos y cada uno de sus datos, no busca explosivos, drogas, armas o contrabando, busca adivinar sus intenciones, presentes y futuras, y anticiparse a ellas, en caso de que planee un asesinato, perpretar un secuestro, o llevar a cabo un acto terrorista dentro del territorio norteamericano. Vamos, que por ejemplo es usted escritor y , como está aburrido en la cola de recogida de equipajes, se pone a pensar en el desarrollo del thriller que está escribiendo y ¡zas!, en un momento puede quedar rodeado de policías que le encerrarán de inmediato. Y luego explíqueles que era una novela, que estos americanos son muy suyos.
Porque además da igual que el proyecto mental sea para ahora o para más adelante, si la máquina decide que sus intenciones están dentro del canon que se le ha facilitado, inmediatamente actuará la policía.
Según la revista New Scientist, la cuestión es anticiparse. El proyesto se llama PHI (proyecto intento hostíl) y es el último invento del Homeland Security (DHS), el Departamento del Gobierno Federal norteamericano.
Se supone que el sistema va a identificar todas las expresiones faciales, formas de caminar y moverse, presión sanguínea, pulso, transpiración y dilatación de la pupila, que conforman "la huella" de la hostilidad o que delatan la intención de engañar. El Software que interpretará la información obtenida aplicará una serie de algoritmos que le permitirán clasificar las futuras intenciones.
Después de todo se trata de un sistema de ahorro porque actualmente ya llevan tiempo con una serie de agentes vigilando "microexpresiones faciales", agentes que están especialmente entrenados en detección del comportamiento y que están desplegados por los aeropuertos con la misión de observar atentamente a los viajeros. La máquina ahorrará todos estos sueldos y horas extras y no tendrá que abordar a las personas, las analizará desde lejos.
Visto lo visto, si no le resulta imprescindible ir a EEUU, quédese mejor aquí, que allí hasta un estornudo puede ser mortal, porque a saber qué pretendía usted estornudando.