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Los vecinos de la calle Cabanes de Barcelona (Poble-sec), desesperados de no poder dormir han acabado poniendo este anuncio en los árboles del barrio. Se ve que el dueño lo pone en el balcón y con el frío que está haciendo el animalito da chillidos aterradores. Igual habría que hacer con los que sacan los perros a las terrazas y los abandonan allí todo el día, aullando y quejándose de su soledad. Aunque es posible que el cartel no acabe de ser efectivo si los dueños son personas solamente preocupadas por su propia satisfacción y no entienden que no molestar a los demás es una señal, de las mejores, de poseer una buena educación.
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