miércoles, 22 de diciembre de 2010

LAS GRANDES PERSONAS



LAS GRANDES PERSONAS

Vivimos en una sociedad que cada día  me parece más estremecedora.

Leemos la tragedia de esa niña de 14 años de la calle Serrano madrileña que, presuntamente enamorada de un rumano de 22 años y buen parecer, se fuga de su casa y lo sigue hasta un pueblo de Badajoz, Arroyo de San Servan, pueblo pequeño donde casi todo el mundo se conoce.

Llegados al pueblo, comienza el calvario de la niña que, según comentan, por su aspecto físico, delgadita y frágil, más parece tener doce que catorce años. No pierdan de vista este dato porque el novio comienza a prostituirla y resulta que encuentra clientes en el pueblo. Hombres que no eran ciegos y a los que no les importa realizar sexo con una chiquilla. Hombres que igual tienen hijas y nietas. ¿Qué clase de monstruos está produciendo esta sociedad?

Hombres de cincuenta a setenta años se acuestan con una niña que aparenta doce años por 30 euros. Y el pueblo lo sabe porque es un hecho común y corriente que a nadie sorprende ni asusta.

Un policía ha logrado sacarla de ese calvario, pero hay detenidos que han quedado en libertad con cargos. Un hombre de 55 años, uno de los detenidos, ex concejal de Izquierda Unida, Daniel Cangas, se ha suicidado porque según sus vecinos "no ha podido soportar la presión". Antes de ser detenido parece que la conciencia no le presionaba en lo más mínimo, a pesar de la edad de la menor, algunos dicen que porque pensaban que "era rumana". ¿De verdad que eso puede ser una disculpa? Una niña, sea de la nacionalidda que sea, rica o pobre, sigue siendo una niña. De él dicen sus vecinos que era "una gran persona".

Pero es que hay cuatro vecinos más del pueblo que han sido también encausados, amén de siete rumanos. Los cinco vecinos son: el juez de paz, Francisco Izaguirre Copote, ex concejal de Festejos del PSOE, un trabajador encargado del basurero municipal, un jubilado, también ex trabajador municipal encargado de Parques y Jardines y un labrador. Seguramente todos considerados también por sus vecinos excelentes personas. Su bondad, su dignidad y su decencia están presuntamente tasadas en 30 euros, lo que les costaba el rato de sexo con una niña.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Algunos políticos dicen, que de que nos quejamos de su gestión (si es que a eso se le puede llamar gestión), si ellos son producto y reflejo de quienes representan.
En este caso, la razón no les falta.
Un saludo y feliz Noiteboa.
Ka.

Ishtar dijo...

Francamente, no me siento reflejada en ellos, y lo que es peor, ni representada minimamente.
Feliz Nochebuena y feliz día de Navidad, que las hadas le acompañen.
Saludos.