martes, 6 de marzo de 2012

SOBRE LA FALTA DE ÉTICA




SOBRE LA FALTA DE ÉTICA


Menos mal que ellos mismos se lo reconocen, en el PSOE carecen de ética. Entre tanto ERE irregular y tantos fondos de reptiles, aparecen ahora nuevas informaciones sobre una empresa pública dependiente de la Consejería de Economía de la Junta de Andalucía, Invercaria.


La presidenta de Invercaria, Laura Gómis Nogales (que fue nombrada para ese puesto tras contratar a Iván Chaves, el hijo de Manuel Chaves, ex presidende de la Junta) reconoce en unas grabaciones que se han conocido ahora las numerosas irregularidades en la gestión de dicha empresa pública así como el reparto a su aire de las ayudas e inversiones.


En dichas grabaciones reconoce que todos los cargos superiores de la Junta estaban al tanto de dichas prácticas, lo que deja a Griñan a los pies de los caballos. Desde el PSOE dicen ahora que las grabaciones están manipuladas, algo tienen que decir para echar balones fuera, pero la Juez Alaya avanza de forma inexorable.


Estas grabaciones reproducen una conversación del 26 de abril de 2011 de Gómis con el entonces director de promoción de Invercaria, Cristóbal Cantos Sánchez. En dicha conversación Gómiz exige a Cantos que elabore diversos expedientes con informes falsos y fechas anteriores porque está en marcha una auditoría y necesita justificar ayudas que se han concedido sin cumplir los requisitos legales.


Cuando Cantos le dice que no le parece un comportamiento ético, Gómis responde que si ella se comprometiera con la ética no estaría trabajando con esa organización. Y cuando Cantos insiste "yo tengo que ser honrado, te puedo hacer un informe con la verdad y tú decides si te vale o no".


Gómis le contesta "entonces no me vales para trabajar en Invercaria", (poco después era despedido) y "yo sólo hago lo que todos hacen". Con lo que deja claro que el procedimiento habitual era hacer cada cual de su capa un sayo y el que venga detrás, que arree.


La cuestión es que Invercaria invirtió más de 60 millones de euros en operaciones irregulares y a cuenta del bolsillo de todos los andaluces. La auditoría de la Cámara de Cuentas deja muy claro que en Invercaria los fondos públicos se concedían de manera opaca y discrecional, sin criterio y sin publicidad.


Y como tontos no son, hay que llegar a la conclusión que mucho de ese dinero "se perdía" por el camino, ya me entienden. Así está Andalucía, en la ruina, tras 30 años de gobierno del PSOE.

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