Un veterinario taiwanés de 38 años, ha recuperado su brazo después de que le hubiera sido amputado de un mordisco por un feroz cocodrilo. Gracias a una delicada operación de microcirugía han podido ser conectados músculos, nervios y vasos capilares.
La policía, que tardó dos horas en llegar al lugar del suceso, se vió obligada a disparar al cocodrilo y matarlo para poder recuperar el brazo y llevarlo al hospital.
No hay comentarios:
Publicar un comentario