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El pueblo de Vícar, en la comarca del Poniente almeriense, al suroeste de la provincia, sirvió de asentamiento de poblados romanos y árabes.
De ahí debe venirle el gusto por el Arte al alcalde.
El alcalde actual, socialista, se va a gastar un millón de euros del Plan E, en dos esculturas. Una de ellas, dedicada a los agricultores del municipio, cuesta nada menos que 600.000 euros; debe ser porque de los 2.600 parados del pueblo, 350 son precisamente agricultores, seguro que piensa que cuando no hay pan, bien viene un homenaje.
Los agricultores, poco agradecidos, comentan que hubieran preferido que el dinero se invirtiera mejor en comprarles semillas y los plásticos destrozados en los últimos temporales. Demasiado pragmáticos para el temperamento artístico del alcalde, seguramente.
El Gobierno ha concedido al Ayuntamiento de Vícar la friolera de 2,4 millones de euros para el desarrollo de nueve proyectos del Plan E, pero la escultura de marras y las obras de la Puerta del Corazón del Poniente se llevan ya el 40% de esa cantidad.
Los ciudadanos del municipio se preguntan por qué acometen desde el Ayuntamiento obras tan alegremente, si deben en la actualidad más de 51 millones de euros y a veces no pueden ni pagar la nómina de sus propios trabajadores, pero claro seguramente es que no son entendidos en Arte, como lo es indudablemente el señor alcalde.
2 comentarios:
Los ciudad-anos , es decir, a los que le quitan por todos los lados, aun lo entenderían menos si supiesen la comisión que se llevan algunos. Este es el recorte jetapé.
Ka
Y lo que aún nos queda por ver.
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