LOS ESPAÑOLES SE MERECEN UN GOBIERNO QUE NO LES MIENTA

LOS ESPAÑOLES SE MERECEN UN GOBIERNO QUE NO LES MIENTA

Cuanta quina deben de llevar tragada muchos socialistas y no sólo Perez Rubalcaba que pronunció esa frase la noche del 13 de marzo de 2004. En efecto, los españoles nos merecemos, al menos, un Gobierno que no nos mienta, pero ningún Gobierno de la democracia española ha mentido más y peor que el de Rodríguez.


Desde los que se desesperan sin llegar a saber quién mató realmente a sus allegados el 11M a los que le votaron, nadie puede decir hoy que Rodríguez haya sido alguna vez sincero.


Mentira tras mentira ha llegado a creerse sus propios embustes, desde decir que descartaba recortes drásticos para anunciar los recortes más drásticos de la democracia a los pocos días, hasta negar la crisis y llamarla desaceleración, y decir que éramos el sistema financiero más sólido y estable del mundo, y ahí tenemos las Cajas como locas tratando de fusionarse para huir de la quema. De creerse un ejemplo para Europa a tener que reconocer que el paro va a seguir creciendo hasta un 20%, y eso mirándolo con ojos extraordinariamente optimistas.

Se van a seguir destruyendo puestos de trabajo por lo menos hasta 2013 y ahora empiezan a reconocerlo. Prácticamente la mitad del presupuesto no financiero del Estado, 60.000 millones de euros, se va a ir en pagar el desempleo y la Deuda Pública.


No obstante, pese al desempleo, la subida del IVA y otros impuestos, el Gobierno, eternamente en Babia, se atreve a afirmar que el consumo privado subirá en un  1,8% el próximo año, aunque nadie sabe en qué se basan para afirmar tal cosa. No solamente nos sacan cuanto quieren a base de impuestos sin aclarar nunca bien en qué lo gastan, sino que generan déficit (es decir Deuda Pública), lo que en cualquier empresa haría que los pusieran en la calle por incompetentes.

Pero aquí se odia a los empresarios, creadores de empleo, se les llama desde especuladores a sicarios, como la última perlita de Cándido Méndez y nunca saldremos de la crisis si no se cortan las alas de los sindicatos, nos dejamos de subvenciones y que se arreglen con las cuotas de sus afiliados, y se cambia además el sistema de votaciones a la hora de las elecciones, listas abiertas y que cada cual sepa a quien va a dar su confianza y su voto. Así en los Partidos irían subiendo los mejores y no los que se limitan a decir sí a cuanto diga el líder porque "el que se mueva, no sale en la foto".