¿QUIÉN DIJO CRISIS?
El Gobierno repite diariamente que no hay dinero y casi cada día se suceden las amenazas de recortes de pensiones o en Sanidad, también hablan de imponer un nuevo copago sanitario (y digo uno nuevo porque lo que es pagar, ya pagamos), porque no hay un euro en caja.
Pero parece que en algunos sectores no saben nada de crisis. Por ejemplo, en Correos, Sociedad Estatal, por si no lo saben, ha entrado en vigor el III Convenio Colectivo, firmado por el Presidente de Correos, Alberto Lafuente, que inmediatamente fue nombrado presidente de la Comisión Nacional de la Energía, el 15 de julio, y sustituido por Ángel Agudo San Emeterio, y los Sindicatos: CCOO, UGT, CSIF y Sindicato Libre, el pasado 5 de abril.
Los empleados de Correos podrán solicitar, según el nuevo Convenio, en anticipos y préstamos hasta 4.500 euros, sin intereses y con una amortización de 24 meses.
Pero además tendrán derecho a percibir ayudas para tratamientos sanitarios no cubiertos por la Seguridad Social o por Muface, como audiovisuales, bucales, motrices, psicomotrices y crónicos de la alimentación. Y podrán solicitar ayudas destinadas a subvencionar la contratación de plazas en Escuelas Infantiles o Centros de Educación Infantil para hijos de hasta tres años. Así como ayudas para sufragar gastos escolares, libros y material escolar para jóvenes entre 0 y 24 años. También se sufragarán los gastos de matriculas y demás gastos de inscripción en Universidades a todo el personal laboral de Correos.
Además se concede a los Sindicatos la creación de una Comisión Central con competencias practicamente ilimitadas y con casi plenos poderes para hacer y deshacer en cuestión de horarios, jornadas, turnos, sistemas de trabajo, traslados y reestructuraciones de servicios. Todo debe de recibir el visto bueno de dicha Comisión. Y por supuesto en los procesos de ingreso o convocatoria en bolsas de trabajo temporal. En todos los documentos figurará a partir de ahora el anagrama de la Comisión junto al de Correos.
También podrá la Comisión revocar en cualquier momento las decisiones adoptadas por las delegaciones territoriales. Igualmente controlarán los Sindicatos el dinero destinado a la Formación, medios y materiales didácticos, alojamiento, manutención y desplazamientos.
Se le abonará a los Sindicatos los gastos de la actividad sindical, dietas, viajes, kilometrajes, comidas y demás gastos que tengan. Se pueden imaginar el gasto de cerca de 300 liberados que tienen en los diferentes comités, reuniéndose cada dos por tres. Eso es ahorrar en tiempos de crisis. Y como el dinero público "no es de nadie" pues nos subirán los impuestos y nos ahogarán un poco más a todos en beneficio de unos cuantos. Vamos, como siempre.
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