domingo, 16 de octubre de 2011

UNA INDIGNIDAD LLEVA A LA SIGUIENTE



UNA INDIGNIDAD LLEVA A LA SIGUIENTE

El Gobierno de Rodríguez Zapatero se ha reunido con  los terroristas etarras, les ha concedido indultos y salidas de la cárcel con cualquier pretexto así como acercamientos a su tierra.

Esos asesinos han vivido en la cárcel mejor que en su casa, con televisión, ordenador, aprobado asegurado en la carrera que eligieran, salidas al patio sin mezclarse con los presos comunes, faltaría más, y hasta con tratamientos de fertilidad por cuenta del Estado (para que luego digan que no hay dinero para Sanidad).

Tantas concesiones sin la menor contrapartida no podía tener otra consecuencia que el exigir constantemente más. Por ello ahora, los "pacíficos", rizando el rizo, exigen pensiones e indemnizaciones para los "pobrecitos terroristas" que se vieron "obligados" a asesinar a tantos inocentes.

Si no fuera un tema tan terrible y que tando dolor ha causado en muchas familias, sería para reirse porque nadie en su sano juicio puede tomar en serio una petición de ese tipo. ¿Se le ocurre a alguien que debamos otorgar medallas e indemnizaciones a Miguel Carcaño, asesino confeso de Marta del Castillo, o al asesino de la niña onubense, Mari Luz, como premio a sus acciones?

Sin embargo, mucho me temo que, rodeados de necios como estamos, acabaremos oyendo voces de políticos que les den la razón a los asesinos y apoyen su pretensiones. Como dijo Alfonso VI "cosas tenedes, Cid, que harán fablar a las piedras".

Si ello fuera posible, me refiero a que las piedras hablasen, en España hace años que se habrían unido unas montañas con otras dando alaridos, porque es imposible hacerlo peor que se ha hecho en estas dos legislaturas ni aunque se hubieran propuesto hacerlo todo mal.

Y todavía anda recalcando en sus mítines el candidato Freddy que ellos son "diferentes" a otros partidos. Pues menos mal, así perdiendo ellos, ganamos todos sea cual sea el partido que gane las elecciones.

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