sábado, 29 de mayo de 2010

ESPAÑA HA PERDIDO EL TIEMPO



ESPAÑA HA PERDIDO EL TIEMPO

El semanario británico The Economist dedica un artículo a la intervención de CajaSur  titulado "Un desorden profano", y opina en él que España ha perdido un tiempo precioso en lugar de tomar las medidas oportunas para luchar contra la crisis y reestructurar todo el sistema financiero, aclarando que los Bancos y Cajas españoles están en una situación muy complicada que puede empeorar en lo que queda de año.

También dice que la fusión fallida de CajaSur y Unicaja ha disparado los temores internacionales sobre la verdadera situación de los Bancos españoles y la capacidad del Gobierno para solucionar dichos problemas porque actúa anteponiendo la política a la razón. Y anuncia que la intervención de dos Cajas (Caja Castilla La Mancha y CajaSur) es el inicio de un proceso más largo que puede incluir a otras entidades.


Y recomienda que si quieren atraer capital privado debe cesar la influencia de los políticos en Bancos y Cajas.


O sea, lo que todas las personas sensatas llevamos tiempo repitiendo sin que Rodríguez se de por enterado.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Entramos en el oscuro mundo, en el mundo de las sombras. ¿Quien es España?
¿Que pintamos en todo esto los ciudadanos de a píe?
¿Solo pagamos los impuestos?
Aflora la corrupción en todas las esquinas y ¿Quien persigue esto?
Un sin fin de preguntas sin respuesta.
¿Y la torre de Babel que hace?.- Pues nada seguir manteniendo a 40 o 50 mil babelianos con sueldos y dietas sin limite.
¿Quien arregla esto? ¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿???????????

Ka

Ishtar dijo...

Arreglarlo implicaría dedicarse a la vez a todos los frentes, no solamente al económico, porque también hay un grave declive de valores morales, de educación, de satisfacción del trabajo bien hecho, porque nos están trasmitiendo constantemente que solamente es válido el patrón dinero y eso no es así, porque más allá de las necesidades mínimas de cada persona hay muchas otras cosas importantes que la sociedad actual, a través de sus desgraciados gobernantes, está desvalorizando en nuestro país, restándoles constantemente importancia, y creo que eso forma una parte muy importante del problema actual que padecemos. No solamente estamos en la mayor ruina económica de la democracia, sino también en la más tremenda ruina moral.