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Paisajes de cuento donde creeremos ver ondinas, duendes y hadas, encantairas, donas d'aigua, filanderas, bruxas, toda una galería de seres mágicos y extraordinarios.
Ídolo prerrománico
Arroyos transparentes donde los pueblos se asoman
El tiempo detenidoUn precioso destino para los fines de semana de otoño es esta sierra, a caballo entre Galicia, Asturias y León, Parque Nacional y reino natural de historias y leyendas, como la Torre de Doiras, donde dicen que vivió Aldara, la joven convertida en cierva, vestigios vivos de un pasado remoto de más de dos mil años como las pallozas, preciosas cabañas semicirculares donde hombres y animales compartían techo para darse mutuamente calor y aventar el miedo de los largos inviernos. Hoy sigue todavía siendo otro mundo, un mundo tranquilo, de riachuelos, bosques profundos, valles, carreteras onduladas como serpientes, un mundo donde el urogallo es el rey con su canto pero que multitud de animales habitan como en el mejor de los cuentos, rodeados de altísimos castaños centenarios. Visiten cualquiera de sus rutas, merece la pena.
6 comentarios:
Outra das miñas paranoías.
Cando vexo ese idolo, ese morador da pedra, se me ocurre que o puxeron alí para avisar e alexar
a´queles perturbadores da tranquilidade d´estes idilicos lugares.
Parece decir: Idevos lambons é non me toquedes os collons.
Deixade descansar a miña raiña moura.
O uro-galo no su canto de amor, o mesmo, levade d´aquí eses cabalos fiscales, cheirentos e ruidosos, que a miña moza non me escoita.
Indudablemente los ídolos han servido siempre como invocación de lo que se desea o para espantar lo que se teme y probablemente todo andaba un poco mezclado porque el ser humano siempre ha tenido miedo a lo desconocido, al más allá, la muerte, siempre ha infundido pavor, en todas las culturas.
Hola Ishtarr, aqui me tienes de visita y mira que me encuentro...
Me encantan las fotos, y te agradezco que las hayas puesto, de paso os invito a visitra esta tierra ,con todo lo que hay por descubrir en ella, mil besos desde la tierra de los mil rios.
Cuanto me alegra tu visita, María, te echo de menos ahora que no entras a diario en ningún foro de los que yo visito y también echo de menos esa sabiduría tuya que diría genética de amasar el pan y traernos rumores antiguos con tus recetas, trasuntos de otro tiempo, de otra época en la que la vida era más tranquila, relajada y feliz, como esa tierra de bosques y arroyos en la que vives, ese reino de hadas eternamente verde que recuerdo a menudo. Un gran abrazo azul.
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