LA ANGORILLA

LA ANGORRILLA

Se publican en la prensa en estos días todos los detalles de la estancia de Corinna Larsen en España, estancia de varios años que según ella nunca existió. Pero salen a la luz hasta las obras de acondicionamiento que se realizaron en el palacete de La Angorrilla para que ella y su hijo vivieran cómodamente allí, hasta se construyó una piscina. Y todos los gastos de escoltas, cacerías, coches de alta gama, idas y venidas, corriendo por cuenta de los españoles.


Curioso nombre ese de La Angorrilla, la angorilla o angorina es una fibra textil sintética que imita a la angora, como Corinna es una princesa de pega que imita a las verdaderas. Pero lo que no es de pega es la cantidad de dinero público que se ha gastado alegremente en estos asuntos tan particulares, la trama de El collar de la Reina, de Dumas, se queda en nada comparada con lo que en España se malversa constantemente y sin el menor rebozo.


Y que me dicen de las declaraciones de Urdangarín ante el juez respecto a que García Revenga y la infanta Cristina estaban en el Instituto Nòor para "comodidad, formalismo y por ser una persona cercana" y por "voluntad máxima de dar transparencia y normalidad a las cosas". Lo que le ha faltado añadir son dos palabras " dar apariencia", porque de eso y no de otra cosa se trataba, de dar apariencia de que todo era normal y comme il faut, sin serlo, claro. Y aún se queja su abogado de la condena social que está sufriendo la familia, quizás espera que les aplaudamos, encima.


Recordemos que García Revenga era el tesorero de Nòor, qué casualidad, como Bárcenas, y la infanta vocal, y a pesar de ello según Urdangarín "no hacían nada" y estaban allí porque hacía falta cinco personas para la Junta. Y cuando el juez le dice que los estatutos aprobados por ellos mismos dicen que basta con tres personas, Urdangarín afirma que no sabía lo que ponían los estatutos y que en realidad la contabilidad la llevaba Marco Tejeiro. Y a preguntas del juez de por qué no nombrar entonces tesorero a Marco Tejeiro, dice que "no lo sabe". Estos saben más que los ratones colorados.


Y los gastos suntuarios de acondicionamiento del carísimo palacete de Pedralbes, al que también construyeron piscina, pista de tenis y cambiaron todos los sanitarios por otros que deben tener música porque salieron por más de 140.000 euros. Los gastos en obras ascendieron a más de tres millones de euros y cuando el juez pregunta a Urdangarín cuanto ganaba de sueldo con Telefónica dice que no sabe exactamente, que quizás sobre 350.000 dólares. Qué van a saber estos si viajan gratis, si la casa en Washington era por cuenta de Telefónica y el préstamo para pagar la de Pedralbes es a un interés del 0%. 

Y García Revenga declara al juez que creía que ser tesorero era un puesto honorífico y encima dice que las firmas "cree" que no son suyas.

Estos nos están tomando el pelo de lo lindo y deberían recordar que Alfonso XIII se tuvo que ir de noche, de incógnito, a Cartagena, huyendo y allí embarcó en un buque de la armada hasta Marsella. Se están jugando la corona y la pueden perder, porque la paciencia de los españoles no es eterna.


Estamos necesitando urgentemente una ley de transparencia para esta Familia Real, que se sepa en que se gasta cada uno de los euros que reciben de nuestros impuestos.