CLAUDE MONET (1840-1926)

Tal día como hoy, el 14 de noviembre de 1840, nace en París, en el nº 45 de la rue Lafitte, Oscar Claude Monet. Fue el segundo hijo de un matrimonio con problemas económicos que se vieron obligados a trasladarse a Le Havre, donde un cuñado les podía ofrecer trabajo. Allí descubriría en la escuela, Claude, sus primeras inquietudes artísticas. Y a los quince años ya lo conocían como un excelente caricaturista. Pero el joven Monet ambicionaba otra cosa, hubiera podido ser un pintor rico, simplemente con pintar lo que estaba de moda, lo que le solicitaban, pero él buscaba algo más. Él deseaba pintar la luz, atrapar el instante en una pincelada. Su mayor deseo era retener el tiempo fugaz e irrepetible en la existencia, la luz que huye y ya no es la misma de un instante al siguiente.
A los impresionistas, y naturalmente a Monet, les apasionaba todo lo que era susceptible de cambiar en un momento, las nubes, las sombras, el río, las flores...
Monet pintaba siempre al aire libre, en pinceladas rápidas que es necesario contemplar a la distancia adecuada. Pinta sin contornos, nunca usa el negro y sus pinceladas son siempre de colores puros, sin mezclas, es nuestro ojo, al contemplar su pintura, quien mezcla el color.
Llevó a su máxima expresión el estado transitorio de la luz natural y nos ha dejado obras maravillosas.