EL DICTADOR VENEZOLANO

Cuando le conviene habla de EE UU como "pueblo hermano"

De la familia. Uno y otro hablan sin saber bien lo que dicen.

El Presidente venezolano ejerce una Dictadura moderna, es golpista y cambia las leyes de su país a su capricho personal. Las votaciones en Venezuela no son de meter el sobre en una urna como en el resto del mundo democrático, sino elecciones informatizadas que vete a saber cuantas veces modifican para lograr salir electos.
Ha dicho Chavez, a la luz de los recientes rifirrafes, que el pueblo venezolano puso fin al dominio del Imperio Español, en la Batalla de Carabobo (1821) y por aquí no sabíamos que era tan longevo, pero la faz no le ha cambiado.
¿Para cuando dejará Rodríguez esa cosa tan socorrida de "llamar a consultas" a nuestro Embajador en Venezuela? Sería la única manera de parar esa verborrea inacabable de Chavez.
Desde aquí anuncio que es muy posible que este Chavez vocinglero de hoy, acabe como el general Noriega, en la cárcel.
La diplomacia del Gobierno actual español es tan calamitosa que la actitud de Chavez ante el Rey, se basa en unas declaraciones del Ministro Moratinos que acusó en televisión, en 59" , al ex Presidente Aznar de estar detrás del golpe de estado contra Chavez, ¿qué tiene de raro que lo crean?.
Si en sus respectivos países, estos patanes sacados adelante, son capaces de transgredir leyes, violar constituciones y rehacerlas a su gusto y capricho para eternizarse en el cargo, cohartar libertades y derechos de los ciudadanos y meterse incluso en la forma que consideran adecuada para vestir, ¿por qué iban a respetar al Presidente y al Rey de España? Si precisamente este Presidente del Gobierno Español es el que ha hecho "la vista gorda" en Bolivia y Ecuador ante el trato que están recibiendo las empresas españolas que han invertido allí. Si callas, tragas y aguantas una vez, ya callas y tragas, siempre. El descaro del Presidente Ortega, con serias amenazas a los intereses españoles es su país, es mucho más grave que la palabrería hueca de Chavez, es en ese momento, cuando hablaba Ortega, cuando Rodríguez hubiera debido, y con él toda la Delegación Española, haberse levantado y salido del recinto y abandonar la Cumbre.
Lo verdaderamente triste es que no apoyáramos de verdad el golpe contra Chavez, para haber impedido que este charlatán de feria se cargue Venezuela. Los coqueteos de Rodríguez con estos países ha tenido y tiene muy graves consecuencias para España, porque un país como el nuestro, que forma parte de la Unión Europea no puede, de ninguna manera, aliarse con presidentes fundamentalistas en acciones e ideas en contra del Imperio Yanqui, eso se acaba pagando.
Se está utilizando cada día en el debate político el insulto y el exabrupto para defender posiciones y descalificar al que piense de modo diferente. Se está perdiendo el necesario nivel de dignidad, la imprescindible Ética, que debe presidir cualquier debate político en una sociedad democrática y las consecuencias de esto es el bochornoso espectáculo que hemos podido contemplar en todas las televisiones a cargo de estos dos indeseables que han llegado a presidentes de sus respectivos países no se sabe a través de qué oscuros manejos.