jueves, 17 de enero de 2008

IZQUIERDAS Y DERECHAS



Ahora que se acercan las elecciones vemos de nuevo a los políticos tratando de enfrentar a los ciudadanos con la vieja dicotomía de "pobres o ricos", como si todavía estuviésemos en la España de los años 40. La izquierda de los pobres y la derecha de los ricos. Ya decíamos hace poco que desde el PSOE a Pizarro, por no poder acusarlo de otra cosa, lo acusan de rico. Y yo me pregunto si ellos son pobres. Por ejemplo, la familia de María Teresa Fernández de la "Vogue" tiene grandes intereses en el mercado de las llamadas energías limpias, gracias por cierto a las importantes subvenciones recibidas del PIER (Plan Impulsor de las Energías Renovables), cuyas ayudas se han multiplicado, casualmente, por diez en el último ejercicio hasta los 342.000 euros, lo cual les ha permitido hacerse su propio hueco en este complejo mercado.
El diario El Economista afirma que este "Imperio de la Vega", crece como la espuma desde la entrada de María Teresa en el Gobierno y sus beneficios se han duplicado.
La hoy vicepresidenta ha sido accionista e incluso secretaria del Consejo de alguna de estas empresas familiares. En teoría, a partir de su nombramiento ella ha debido abandonar sus lazos profesionales con dichas empresas, pero su familia mantiene el control de las mismas.
En este holding empresarial también participó el padre de la vicepresidenta, Wenceslao, funcionario del Ministerio de Trabajo durante el franquismo, y ahora lo encabeza su hermano, Jesús Fernández de la Vega, que antes fue Director de Recursos Humanos de Repsol, compañía para la que aún trabaja y es además miembro del Consejo Económico y Social y Consejero de Petronor, filial de Repsol.
Las estrellas del holding De la Vega son Hidroeléctrica Vega y Saltos del Tiétar. Por cierto, la Hidroeléctrica Vega ha duplicado sus beneficios en estos dos últimos años. Y Saltos de Gredos, también de la familia, ha multiplicado su facturación por cuatro. La familia De la Vega tiene explotaciones en Ávila, Segovia, Toledo y Lérida. Gracias a todos estos negocios, el marido de su sobrina María Felipe, Antonio Marín, ha acumulado un importante patrimonio inmobiliario, aunque parte de las propiedades están puestas a nombre de las empresas, como un chalet de lujo en Somosaguas (Madrid) y tiene además varias fincas, la mayor de las cuales, La Quinta de Don Pedro, con más de 275 hectáreas, tiene diferentes cultivos de secano, crían ganado y recibió en su día subvenciones para el lino ¿se acuerdan la que formaron con el lino y la pobre Loyola de Palacio? Pues eso, siempre viendo la paja en el ojo ajeno y nunca la viga en el propio, qué curioso.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sobrina del escritor lucense Don Celestino Fernandez de la Vega