Ana María leyendo los papeles de divorcio (Foto: Fernando Blanco)
Una mujer, Ana María, tiene que pagar por orden de la juez que lleva su divorcio un importe tan alto, entre la mitad de la hipoteca y la pensión de su hijo, que solamente tiene 50 euros para vivir todo el mes.
En un principio Ana María tenía la custodia de su hijo, pero en noviembre pasado la juez decidió elevar a 531€ el recibo de la hipoteca que ella venía pagando, más 50 euros más de atrasos al considerar la hipoteca parte de la pensión alimenticia, hasta ese momento pagaba solamente 142€ por dicha hipoteca. Ella desea vender la casa y hacer frente a las deudas pero el marido no quiere vender. Ahogada por la falta de dinero, Ana María tuvo que dejar su hijo con el padre, pero en vista de eso, la juez le ha concedido la custodia al padre y ella no tiene ni régimen de visitas,desde noviembre pasado no ha vuelto a ver a su hijo porque el padre se niega a que lo vea, además debe pasar al padre 250 euros de pensión para el niño. En total, le quedan cincuenta euros para sobrevivir de su nómina, el marido se quedó con el coche, los ahorros, la moto y ahora, el hijo. ¿Se extrañará la juez si este caso acaba en suicidio o peor? ¿Se puede comer y pagar luz, agua etc...con cincuenta miserables euros? ¿En qué país utópico vive esta juez que ha dictado esa sentencia?
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