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Es más que curioso que con lo que le cuesta al españolito corriente llegar a fin de mes, o pagar una hipoteca a lo largo de casi toda su vida para llegar a tener un piso en propiedad, a José Bono se le multipliquen las propiedades como en el milagro de los panes y los peces.
Según publica La Gaceta, Bono ha comprado un ático de un millón de euros en el barrio de Salamanca de Madrid, sí además del piso del hijo, del chalet de Toledo, y de la Hípica, le ha quedado dinero para comprarse éste atico, listo que es el hombre.
Pero la cosa no acaba ahí, porque el artículo de La Gaceta destaca que la familia Bono posee dos áticos más en Estepona, en una de las más lujosas urbanizaciones de la zona.
Entre los dos áticos suman un total de 267 metros cuadrados y fueron adquiridos por permuta de unos terrenos en el año 2006. Lo más singular es que Bono declaraba en 2004 tener solamente un terreno rústico en Salobre, de un valor inferior a los 20.000 euros. Y los áticos de Estepona valen 365.000 y 489.000 euros respectivamente, por lo que no parece un intercambio ajustado. El promotor vuelve a ser Rafael Santamaría, un constructor íntimo de Bono, dueño de la inmobiliaria Reyal Urbis.
Los dos áticos son propiedad de la sociedad patrimonial Ahorros Familiares Saja (y tanto que ahorran), cuya administradora única es la esposa de Bono, Ana Rodríguez, que ostenta el 80% de las acciones y el restante 20% se reparte entre su marido y sus tres hijas, con un 5% cada uno.
Los áticos tienen dos dormitorios uno de ellos y el otro, tres. Poseen terrazas, piscinas cubiertas y exteriores, gimnasio, jacuzzi, sauna y jardín con lago artificial. No les falta un detalle, así que ya ven lo que hace el ahorro. Ya lo dice el viejo refrán español, "a Dios rogando y con el mazo dando".
A todas estas propiedades hay que añadir la residencia habitual de la familia, un chalet en la localidad de Olias del Rey, en la provincia de Toledo.
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