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A muchos ciudadanos nos gustaría saber qué motivos son suficientes para mantener a buen recaudo a los delincuentes.
En Sevilla, la juez del Juzgado de Instrucción nº 12, ha dejado en libertad a todos los miembros de una conocida banda de delicuentes que llevan "arrasadas" más de cuarenta oficinas y despachos profesionales en el centro de Sevilla, porque el Fiscal entendió que no existían "motivos suficientes" para que permanecieran encarcelados, que se sepa ninguna de las oficinas robadas era suya, claro.
Según la policía la banda utilizaba la técnica llamada del "resbalón", es decir, deslizaban un plástico duro por la ranura de la puerta y accedían así con facilidad a los portales de los edificios, y de ahí a las oficinas cuyas puertas forzaban con palanquetas y desactivaban los sistemas de seguridad y ya "dueños del escenario", se llevaban todo lo que podían, ordenadores portátiles, teléfonos móviles, PDA, cámaras digitales, escáneres, proyectores, impresoras, grabadoras y, por supuesto, dinero.
También habían forzado algunos domicilios y viviendas habitadas cuyas direcciones encontraban en las oficinas saqueadas.
La policía los detuvo de madrugada con sus "instrumentos" de trabajo: palanquetas, destornilladores, guantes, linternas y todo un arsenal de herramientas adecuadas a su "trabajo"; fueron puestos a disposición judicial e inmediatamente fueron puestos en libertad, exigiendo además al juzgado que les devolvieran sus "herramientas", cosa que hicieron. No era cuestión de que tuvieran que comprar otras para continuar robando ¿verdad? Porque nada más verse en la calle, volvieron a cometer un nuevo robo.
El jefe de la banda, Daniel Benito R. R., que era el encargado de planificar los robos y vender lo sustraído, cuenta en su haber con doce detenciones por delitos similares.
Y los que les quedan, porque una vez en la calle volverán a revolotear por las oficinas.
Acabaremos como en el Oeste americano, todos pertrechados con rifles para defendernos.
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