LA IMPOTENCIA SEXUAL

Causa de muchos problemas en la pareja, la impotencia no es como un dolor de cabeza, que se supera con un analgésico, la pérdida de erección que viene provocada por la edad a partir de los 40 años y se agudiza a los 50, puede ser el anuncio de un grave problema cardiovascular, que de no corregirse puede llevar a un ataque al corazón o a un derrame cerebral con el curso del tiempo. La salud sexual del varón va más allá de la rigidez de su pene, puede estar en peligro su vida. Esto no se refiere, claro está a un fallo esporádico, todos los hombres, sin excepción tienen alguna vez "un mal día" a lo largo de su vida. El problema es cuando esta situación se repite a menudo, al menos el 25% de las veces, entonces es el momento de acudir a un especialista.
El problema puede ser psicológico o físico. Por ejemplo, entre los muy jóvenes, el miedo al fracaso, a demasiadas expectativas. Sin embargo lo más común son las causas de tipo físico debidas a la edad y al tabaco.
La erección es un fenómeno complejo. Cada vez que se erige, y a lo largo de la noche puede hacerlo de manera natural cuatro o cinco veces, en el cuerpo han debido ponerse en función coordinada casi todos los sistemas orgánicos. El sistema cardiovascular, el endocrino, el nervioso, el respiratorio, el sanguíneo, el muscular, y ha requerido de una extraordinaria labor de equipo del cerebro, las hormonas y los vasos sanguíneos. Ahí entra el tema del tabaquismo, que estrecha las arterias y dificulta el riego sanguíneo, y por lo tanto, la erección.
Además del tabaco, la hipertensión, el colesterol, la diabetes y la edad, son factores de riesgo.
Las pastillas han venido en ayuda de estos problemas, pero jamás deben tomarse sin recomendación médica pues podría ser peor el remedio que la enfermedad, como suele decirse.