jueves, 7 de agosto de 2008

EL PRIMER TEATRO DE SHAKESPEARE

Casa que se dice la natal de William Shakespeare en Strarford-upon-Avon



Cuando iban a comenzar las obras de un nuevo teatro, han descubierto lo que fue el primer teatro de Shakespeare, el genial dramaturgo y poeta inglés del siglo XVI. En ese teatro ahora descubierto, fue donde debutó como actor y se representaron sus primeras obras.
Los restos están en la calle New Inn Broadway, en el barrio de Shoreditch, en el este de la ciudad de Londres, actualmente centro del arte y la cultura independientes.
Los arqueólogos sospechaban que se debía encontrar por aquella zona pero nunca había sido encontrado hasta que al iniciar las obras del nuevo teatro para la Tower Theatre Company, han aparecido tan importantes restos.
Aquél teatro, inaugurado en 1576 era al aire libre y tenía una curiosa forma de exágono, como describe del propio Shakespeare en "Enrique V" "esa O de madera". Fue una de las primeras salas teatrales de Londres, allí debutó el dramaturgo como actor con la Compañía The Lord Chamberlain,s' Men, de la que era copropietario, y después como dramaturgo con sus primeras obras.
En 1599, con la construcción de The Globe, Shakespeare comienza a actuar allí hasta su destrucción por un incendio. En este teatro podían entrar 2.000 espectadores.
El presidente de la Compañía que va a construir allí un nuevo teatro, Jeff Kelly, está encantado con el descubrimiento, ya que atraerá a muchos aficionados y "porque saber que actuamos en pleno siglo XXI donde Shakespeare y Bargage actuaron y algunas de las obras de Shakespeare se representaron es una enorme inspiración".
La directora de Arqueología del Museo de Londres, Taryn Nixon, ha comentado por su parte que este descubrimiento tiene algo de místico porque "ofrece un maravilloso sentido de continuidad a lo largo de los siglos". Y es cierto, como si el tiempo estuviera comunicado por una elipse sin término en la que nunca se detuviera el hilo conductor de las historias, porque lo que hoy contamos en obras son problemas eternos que ya estaban presente desde los griegos en el teatro.
De Shakespeare se sigue discutiendo su verdadera identidad pero lo que nunca podrá discutirse es su categoría, su manera sublime de pintar los caracteres de sus personajes, su humor, su capacidad incluso de inventar nuevas palabras y jugar con el idioma. Conocía perfectamente y hablaba el latín y había leído las obras de los principales autores latinos y griegos. En el fondo, da igual quien fuera realmente, es su obra lo que nos queda y su mensaje explícito de vivir y apurar la vida todo lo que se pueda pues el tiempo es muy corto.

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