EN PREMIO A LOS SERVICIOS PRESTADOS

EN PREMIO A LOS SERVICIOS PRESTADOS

Menudo asombro ha habido entre las Fuerzas Armadas cuando se han enterado de que el Ministerio de Defensa acaba de nombrar asesor del subsecretario de Defensa, Vicente Salvador Centelles, nada menos que al general Casimiro José Sanjuán, máximo responsable hasta ese momento del cuartel de Bótoa, Badajoz. 

Y todo el asombro proviene de que se realiza dicho nombramiento después de que el domingo se produjera en ese cuartel precisamente un espectacular robo de una veintena de subfusiles y diez pistolas, de la armería de la base.

El lunes, un día después del robo, se le ascendió a general de división, cosa que aunque ya estaba prevista y aprobada desde el Consejo de Ministros del viernes, se podía haber retrasado como se ha hecho en otras ocasiones, más que nada por lo mal que suena. Te hacen en el cuartel del que estás al mando el mayor robo de armas de guerra sucedido en España en los últimos años, ¡y te dan dos premios!, ascenso y asesoría.

En cambio, como alguien tiene que pagar el pato, han apartado de  su puesto al coronel jefe de la unidad de servicios de Bótoa. También los militares que hacían guardia y estaban encargados de la seguridad han sido relevados de su trabajo hasta que concluyan las investigaciones.

Desde el principio se ha dado por hecho que los asaltantes contaban con ayuda interna, de uno o varios efectivos del acuartelamiento.