Martínez-Pereda
García Ancos
Bacigalupo
GÓMEZ DE LIAÑO
Este martes la Sección Tercera del Tribunal Europeo de Estrasburgo ha sentenciado que el juez Gómez de Liaño no tuvo un juicio "independiente e imparcial" y el Estado deberá indemnizarle por ello.
Naturalmente esta indemnización llega tarde y es solamente simbólica porque los daños morales causados al juez y los beneficios empresariales de las empresas que fueron investigadas, no pueden repararse.
Queda claro de esta sentencia que los magistrados García Ancos, Bacigalupo Zapater (recientemente jubilado) y Martínez Pereda, violaron el artículo 6.1 del Convenio Europeo de Derechos Humanos, cuando en 1999 como miembros del Tribunal Supremo, condenaron al juez Gómez de Liaño por un supuesto delito de prevaricación continuada al instruir la querella contra Canal Plus y Sogecable. Gomez de Liaño fue condenado a pagar una multa y a no poder ejercer cargos públicos durante 15 años. Nunca ha vuelto a su puesto, pese a que fue indultado por el Gobierno de Aznar.
Con esto se demuestra que en España no tenemos democracia en realidad, porque si los jueces son parciales, actúan por intereses espúreos e ilegítimos, jueces comprados o, al menos, no independientes sino sujetos a fuerzas que son las que controlan la Justicia y el Gobierno y esta lección nos la tienen que dar jueces extranjeros realmente independientes e imparciales, mal, muy mal estamos en este país que pretendíamos democrático.
Gómez de Liaño tenía razón y aquí la democracia no es más que una farsa.
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