SI SU IDEA ERA METER LA PATA, LO HA HECHO HASTA EL FONDO

La imagen de la polémica

La portada del blog donde se ha publicado, con la foto de su autor.

Uno de estos politiquillos de tres al cuarto de esos que no son nada ni nadie fuera de su terruño, edil en Torredembarra (Tarragona) por Alternativa Baix Gaià, marca en Torredembarra de ICV- EUIA, LLuís Suñé, no ha tenido mejor idea que publicar en su blog un montaje fotográfico con una petición internacional de ayuda para apadrinar niños extremeños, utilizando para ello el nombre de Extremadura y su bandera,el anagrama del Estado Español y el de ayuda a la infancia de UNICEF, bajo el lema "Apadrina un niño extremeño por mil euros al mes", se ve que el hombre se cree gracioso. En la foto se puede leer además, "un 8,7 del PIB catalán no es suficiente" y verse unos chiquillos harapientos y despeinados.
Ahora, en vista del escándalo, ha retirado la imagen y pide perdón al "pueblo de Extremadura". Y dice que lo ha puesto como ironía por lo que Cataluña se ve obligada a aportar al resto de España sin que se le reconozca. Y se queja de haber recibido llamadas con amenazas e insultos sin pensar siquiera que quien anda con fuego, se acaba quemando. Eso da idea de su CI.
Lo primero que una persona, para llegar a serlo, debe aprender desde la más tierna infancia es el respeto a los demás, cosa que parece que este independentista no ha llegado aún a aprender. Y después, ya desde la guardería, debe aprenderse el principio de solidaridad entre los seres humanos, para que, si por casualidad se le ocurre meterse en política, sea capaz de entender el Principio de Solidaridad entre las diferentes regiones de un país.
Dicho esto, que agradezca este ejemplo de estulticia que representa menos que nada en política, que el resto de España sabe perfectamente diferenciar una opinión aislada y cerril, propia de alguien que no sabe ni lo que hace ni lo que dice, de la del resto de su comunidad, porque si los españoles dejaran de consumir productos catalanes en masa, muy mal lo iban a pasar, y más en medio de esta crisis, en Cataluña.
Pero el caso exige petición formal de disculpas de la Generalitat y que este politiquillo sea puesto en su lugar: la calle.
Extremadura no es más que Cataluña, pero tampoco menos.