AQUÍ NO PASA NADA, QUE SIGA LA MÚSICA

Pedro Sobes





EL TITANIC


Como en el naufragio del Titanic, aquí no pasa nada, la orquesta puede seguir tocando, danzad, danzad, malditos, hasta el hundimiento total.
Hasta tres veces, sí, como San Pedro, negó Solbes, con toda la barba, en el debate televisivo que mantuvo con Pizarro que hubiera crisis. ¿Crisis, qué crisis?. Era evidente que mintió entonces a todos los españoles, como es evidente que miente ahora cuando habla de "ligera desaceleración", claro con los sueldos que se ponen ellos mismos, ya les vale.
Ayer hemos sabido que el superavit de las cuentas públicas ha caído un 51% en el primer trimestre del año, es decir, que se han fundido la mitad en tres meses. Encima, las medidas que han planteado para ayudar a las familias y empresas a superar las dificultades es más gasto público, es decir que van a terminar hasta con el último euro. ¿Y después qué? Porque los empresarios anuncian ya que de aquí a final de año habrá como poco 500.000 parados más. La hipotecas acaban de volver a subir, llegará un momento que serrá imposible pagarlas, los bancos solamente alargaran el plazo a quienes quieran ellos. Los 400 euros no existen, porque contaban con que lo pagaran las Autonomías, Navarra ya se ha negado a hacerlo y dice que lo pague el Gobierno, si quiere, ya que lo prometió. Los sindicatos no se atreven a levantar la voz, al oposición con la margarita, deshojándola, The Economist, semanario británico, anuncia que llegaremos a un crecimiento del PIB del 1%, si acaso.
Y mientras ellos lo niegan, los ciudadanos que sí viven la crisis, haciendo equilibrios para comer, tantos que ha bajado hasta el consumo de cerveza y se ha resentido el IVA, no se ingresa este impuesto porque ha bajado alarmantemente el consumo, la gente se está ahogando y Rodríguez le pide a la orquesta que siga tocando y no lanza ninguna medida para arreglar la situación.
Y detrás del descenso de la construcción, van las tiendas de muebles, de electrodomésticos, de sanitarios y hasta las de ropa, porque cuando no hay para comer, no se piensa en gastos extras.