LA FELICIDAD IMPOSIBLE

La principal causa de infelicidad del ser humano está en su cerebro, en el sistema límbico. Es esta una estructura que genera respuestas emocionales ante estímulos sensoriales. Se ha llegado a la conclusión por parte de los científicos, que el diseño final de cualquier cerebro es la lucha por la supervivencia. A diferencia de los animales, el cerebro del ser humano posee una compleja organización funcional, ha llegado a entrever la "conciencia de si mismo".
Siempre tendremos matices emocionales que nos llevarán al placer o al dolor por eso nunca tendremos una felicidad completa y quizás eso nos haya llevado a crear lo que llamamos literatura, que en prosa o en poesía, nos permite dar salida al dolor que sentimos y sirve de alivio a nuestra infelicidad.
Aunque en el fondo el sentimiento de felicidad depende de nuestros valores, de nuestra formación, de nuestro carácter y personalidad, de nuestras circunstancias concretas vividas en un momento determinado y, sobre todo, de nuestra mirada y nuestro pensamiento, al final del túnel de la desesperanza siempre podremos ver brillar la luz de la mirada positiva.
No podemos dejar galopar a su antojo al caballo de la infelicidad, partiendo de que el bienestar es algo subjetivo propongámonos el objetivo de la serenidad, de los sentimientos positivos profundos. No confundamos el placer con la felicidad.
El placer, como decía Aristóteles, nos causa deleite corporal por medio de la percepción sensorial. Pero la felicidad es algo mucho más profundo que eso, es en realidad una actividad diaria que tendremos que ejercer cada día de nuestra vida, contra viento y marea, contra todas las circunstancias adversas, es un camino de perfección moral.