UNA PREGUNTA IMPERTINENTE

UNA PREGUNTA IMPERTINENTE

El sector de la distribución textil parece que no pasa por sus mejores momentos en España, como por otra parte le ocurre a todos los demás sectores.

Firmas como Coronel Tapioca, Musgo o la cadena Festa, participadas todas ellas por el capital riesgo, han presentado concurso de acreedores.

Liz Claiborne, firma de moda que lleva años en el Corte Inglés, dividida además por secciones en diferentes zonas del centro comercial, tallas pequeñas, normales y grandes, ha presentado un ERE para las 323 empleadas que tiene en total y se va de España.

Ha alcanzado un acuerdo con los sindicatos para evitarse problemas e irse cuanto antes, ya que viene soportando caídas de ventas de un 16,4% desde 2007.

Más del 80% de sus puntos de ventas tuvieron resultados negativos en 2009, cifra que llegó al 90% en 2010.

El Grupo Mexx Southern Europe, matriz de la firma, ha asegurado una oferta de empleo para un total de 161 trabajadoras, si lo desean, a través de la marca Jones, 14 en puestos de oficinas y 147 en tiendas.  Esa marca ocupará los espacios que deje libre Liz Claiborne en algunos centros del CI, donde más se venda, supongo.

Así, las afectadas por el ERE que reciban una oferta de empleo de Jones, percibirán una indemnización por la extinción de su contrato de trabajo equivalente a 25 días de salario por año trabajado, con un límite de doce mensualidades.

No obstante si la jornada de trabajo es diferente a la que disfrutaban podrán optar por rechazar la oferta y percibir la indemnización prevista para las trabajadoras sin oferta de empleo, en todo caso esto será aplicable a un máximo de 35 empleadas de esas 161.

Las trabajadoras que no hayan recibido oferta de empleo de Jones, percibirán una indemnización por la extinción de contrato equivalente a 40 días de salario por año de servicio, con un límite de 42 mensualidades.

Este compromiso con los sindicatos está aún pendiente de ratificar por las trabajadoras el próximo 17 de febrero.

Y ahora viene la pregunta impertinente, si las ventas han bajado tanto y  teniendo en cuenta los países donde se confeccionan las prendas, los sueldos de esos países, y por lo tanto los beneficios que genera cada una de ellas, ¿por qué no las han bajado suficientemente de precio antes de llegar a este punto?

Y pongo como ejemplo una mochila de Coronel Tapioca que miré el otro día, anunciaba en letras enormes un descuento del 70% sobre su precio habitual, sin embargo la habían rebajado solamente cinco miserables euros respecto al precio anterior. Y esto lo sé muy bien porque es una marca que me gusta, pero cuyos precios son exageradamente caros para lo que ofrecen.