lunes, 7 de febrero de 2011

EL CATALOGUIÑO, AL SUPREMO



EL CATALOGUIÑO, AL SUPREMO

Farmaindustria acaba de presentar ante el Tribunal Superior de Justicia de Galicia un recurso contra el catálogo reducido de medicamentos de esta comunidad pidiendo la interrupción inmediata de la norma.

La patronal española de compañías farmacéuticas innovadoras pretende así paralizar la Ley 12/2010 que creó un catálogo propio de medicamentos en la autonomía gallega, y que el cese legislativo tenga efectos inmediatos.

Trata así de impedir unos daños que califica de "irreparables" para la industria farmacéutica a causa del catálogo único. También han puesto de manifiesto las palabras del presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, quien aseguró que el ahorro previsto en el momento de implementar la idea, no se logrará en términos reales.

Farmaindustria cree que el catálogo rompe con la unidad del mercado del medicamento en España, e invade competencias del Ministerio de Sanidad, Igualdad y Política Social, institución encargada de establecer el catálogo mínimo de fármacos vigentes en todo el territorio nacional.

 La patronal sostiene que los perjudicados por el catálogo no sólo serán la industria, los distribuidores y farmacias sino también los pacientes de la región que pueden ver comprometidos sus tratamientos por una decisión que no debiera ser administrativa o burocrática, sino exclusivamente tomada por un profesional médico.

La Federación de Asociaciones  Científico Médicas Españolas ( FACME) también se ha sumado a la protesta, pues considera que la restricción en la capacidad de prescripción, vulnera la libertad del médico, e igualmente consideran que la Xunta no tiene derecho a excluir o incluir medicamentos pues esto es competencia exclusiva del Ministerio de Sanidad.  Además rompe con la equidad del SNS al restringir el acceso a medicamentos que, sin embargo, responden a las exigencias necesarias para su inclusión en la financiación pública, como ocurre en el resto de autonomías.

Esta norma  generaría desigualdades respecto a la calidad asistencial entre pacientes de diferentes comunidades, con lo que se compromete la seguridad de los pacientes, en este caso, los gallegos.

También el Consejo de Ministros ha aprobado presentar un recurso ante el Tribunal Constitucional contra la Ley de Racionalización del Gasto Farmacéutico de Galicia y con ella, el catálogo priorizado de medicamentos.
Una vez admitido a trámite por el Constitucional, la norma quedará suspendida durante cinco meses, tiempo en el que,  se supone, deberá haber una resolución.


No se comprende que no hayan elegido en la Xunta la prescripción por principio activo (PPA) que tanto ahorro ha asegurado a otras comunidades.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

El pillín, nos salió rana.
Yo ya lo tenía fichado, pero los ingenuos de Galicia bilingüe han quedado chamuscados, ahora los medicamentos.
El otro día en la farmacia me comentaban que hay medicamentos "iguales", pero con diferencias de precios abismales, me ponían de ejemplo los antiácidos, unos a 3 € y otros a 20 €.
Seamos serios estos mangutas se meten en todo, para ellos es todo un negocio personal.
¿Como vamos a creer que no hay ningún negocio oculto en otorgar a un determinado laboratorio la exclusividad de sus productos? Cae de cajón
Aparte.¿Como los laboratorios van a investigar para mejorar sus productos?
Esto ya se está volviendo castaño oscuro, marrón marrón.
Saludos
Ka

Ishtar dijo...

El problema español con los medicamentos viene de antiguo porque nunca hubo una ley que impidiera la copia. En otros países se autorizaban una o dos copias, no más. En España, estos mismos laboratorios que ahora se pelean como gato panza arriba porque no salga un genérico mientras no venza la patente, aceptaban antes de los genéricos llegar a acuerdos con otras marcas para que, mediante el pago de un canon, pudieran sacar al mercado una copia de su producto. ¿Qué ocurría? Que de un mismo principio activo había diez o doce presentaciones, cada una a un precio diferente y de un laboratorio distinto.

Cuando algunos laboratorios plantearon en el Congreso la idea de sacar al mercado EFG (Genéricos), hubo primero que adaptarse a la legislación europea y conceder diez años a las patentes para "resarcirse" de alguna manera del dinero invertido en la investigación. Y al vencimiento de las patentes, se autorizaba la salida de un genérico de ese principio activo.

Pero seguíamos teniendo excesivas "marcas" del mismo principio, que además se multiplicaron cuando los laboratorios olieron el éxito de los genéricos.
Y el problema sigue porque cuando una Autonomía fija un precio máximo para un principio activo, no solamente se ponen a ese precio las EFG sino también las marcas, y como además cada farmacia tiene solamente dos o tres, porque es imposible para un negocio tener treinta presentaciones del mismo principio activo, los ancianos polimedicados se lían completamente porque les cambian el producto cada mes, aunque sea el mismo, la caja es de otro color, y se hacen un verdadero lío.

Pero la Xunta, en vez de hacer un listado de los precios que está dispuesta a pagar por los medicamentos que pasa la Seguridad Social, que debieran ser iguales para todos, ha hecho su propio catálogo y suprimido referencias. De lo cual resulta que los gallegos dejan de ser iguales al resto de los españoles en materia sanitaria y hay medicamentos que no les quieren pasar a ellos, aunque en León o en Cantabria si los pase la Seguridad Social.

Lo que me extraña es que no haya habido manifestaciones en contra de tamaña arbitrariedad.

Por otra parte, en efecto, como los medicamentos se pagan cada vez a un precio menor, los laboratorios innovadores buscan países más favorables a la investigación.
Saludos.

Anónimo dijo...

Pobres gallegos, pobres españoles, que tenemos unos gobiernos que se meten en todo, además de meternos la mano en nuestro bolsillo.
Ayer he dejado de ser percebe para ser gambita, al menos por algunos días.
Saludos
Ka