viernes, 18 de febrero de 2011

SE CREÍA YA OLVIDADO




SE CREÍA YA OLVIDADO

Con la ayuda de la Fiscalía, Bono se creía ya olvidado y a salvo, pero resulta que no, que la asociación Justitia et Veritas (ojalá tuviéramos aquí en España de ambas cosas) presentó el pasado día 9 una querella contra él ante el Tribunal Supremo.

En dicha querella se revelan interesantes datos como que Bono justificó haber comprado dos fincas en Toledo, de 543 metros cuadrados, con los 42.000 euros de una herencia de sus padres. ¿Qué barato compra Bono, verdad? Esta compra la realizó cuando todavía era Presidente de Castilla La Mancha.

Pues la asociación que le ha puesto la querella no debe verlo nada claro porque le acusa de cohecho continuado, delito fiscal y falsificación de documento público por ocultar al Congreso su negocio con la Hípica Almenara de Toledo.

Por cierto, en 2001 el Ayuntamiento de Toledo recalificó los terrenos de la Hípica que pasó de no urbanizable a poder construir naves agropecuarias y en 2005 a poder poner paneles fotovoltáicos para aprovechar las subvenciones de energías alternativas. Parte de su terreno fue expropiado en 2009, 6.671 metros cuadrados, recibiendo una importante cantidad de dinero de Fomento (Pepiño), para que lo que fuera una carretera nacional se convirtiera en una autovía que mejorara las comunicaciones entre Toledo y la Hípica Almenara, esta carretera une con la Radial-4, que pasa por la misma puerta de la urbanización de Francisco Hernando, el Pocero, casualidades de la vida.

En el Boletín Oficial de Castilla La Mancha se publicó en 2004 la declaración de Bono de sus bienes patrimoniales y actividades. En esta declaración, aseguraba haber vendido "varias fincas" heredadas de sus padres y que con esta venta pagó diversas deudas pendientes y financió las viviendas de Toledo y Olías del Rey (Toledo).

Pues resulta que no, que Justitia et Veritas no está de acuerdo que con las fincas heredadas de sus padres se financiara la compra de la casa de Toledo porque la casa se compró tres años antes, según consta en su declaración de 1995.

En la declaración de 1997 y posteriores, Bono declaraba haber destinado el dinero de la venta de las "fincas " heredadas de sus padres, unicamente a la financiación de la casa de Olías del Rey. Hasta para mentir hay que tener buena memoria.

Pero además las supuestas "fincas" heredadas eran en realidad siete parcelas rústicas de olivar de secano, en Salobre (Albacete), con una superficie inferior a dos hectáreas cada una. En 1995 vendió las siete parcelas a un matrimonio de Salobre por siete millones de pesetas, es decir, poco más de 42.000 euros.

Por esa razón los querellantes opinan que no pudo financiar con siete millones de pesetas, como declaró en 2004, la casa de Olías del Rey, que se levanta sobre 401 metros cuadrados y el piso en Toledo de 142 metros cuadrados, y además cancelar deudas pendientes de las que no había la menor huella en su declaración de 1995. La querella incluye a Ana Rodríguez Mosquera, su entonces esposa, como cooperadora necesaria de tanto negocio.

Ya sabemos que la Obra de Dios hace milagros pero lo de la multiplicación de los panes y los peces no consta que haya ocurrido más que una vez.

Para acabar de redondear las cosas, la ex señora Bono, se despacha a gusto en la revista Vanity Fair, diciendo que aquellos que se preguntan de donde sale tanto patrimonio es que son de la derecha pura y dura que quieren hacer una caza de brujas con ellos, tan inocentes y buenos.

Ay, Señor, Señor, lo que hay que leer, después de cuanto llevamos visto.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Si le apretaran los cataplines al pocero, seguro que cantaba mejor que U2.
Saludos
ka

Ishtar dijo...

Aquí se tapan unos a otros, son todos de la misma cuerda.
Saludos.